El papa León XIV volvió a expresar su intención de viajar a América Latina y mencionó una serie de destinos que le gustaría visitar cuando el Vaticano pueda ordenar su agenda internacional. Entre ellos, destacó la basílica de Guadalupe en México, además de Uruguay, Argentina y Perú, países que calificó como “pendientes” y que espera incorporar a futuros recorridos.
El pontífice conversó brevemente con periodistas a la salida de su residencia en Castel Gandolfo y explicó que el Año Jubilar mantiene colmada su agenda diaria, lo que dificulta programar desplazamientos en lo inmediato. Sin embargo, aseguró que el próximo año comenzarán a organizarse los viajes “poco a poco” y remarcó que, “por supuesto”, desea regresar a la región.
“Yo encantado de viajar”, comentó con humor, antes de señalar que también le gustaría volver a Fátima y cumplir su deseo largamente mencionado de rezar ante la Virgen de Guadalupe. En el mismo intercambio, adelantó que Perú figura “por supuesto” entre los destinos que anhela visitar.
Por el momento, no hay giras confirmadas para América Latina. La única salida internacional oficialmente agendada es la que el Papa realizará del 27 de noviembre al 2 de diciembre, cuando visite Turquía y Líbano, dos países que su predecesor, Francisco, había querido conocer en su pontificado.
En los pasillos del Vaticano también circulan versiones sobre un posible recorrido por varias naciones africanas, aunque sin ningún anuncio formal.
Quien ha manifestado en reiteradas ocasiones sus ganas de regresar a Perú es el cardenal Robert Prevost, nacido en Estados Unidos pero nacionalizado peruano, que pasó más de cuatro décadas en el país como misionero y posteriormente como obispo de Chiclayo.