El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, volvió a poner en el centro del debate la calidad de vida de la clase trabajadora al referirse al derecho al descanso y al tiempo personal como pilares de una sociedad más justa.

Durante sus declaraciones, Lula fue contundente al cuestionar los esquemas laborales que dejan a los trabajadores con apenas un día de descanso semanal. “No es justo que el trabajador tenga apenas un día de descanso por semana. El bien más valioso para un ser humano es el tiempo: tiempo más allá del trabajo, tiempo para descansar, cuidar a la familia y acompañar el crecimiento de los hijos”, expresó.

El mandatario subrayó que el desarrollo económico no puede sostenerse a costa del desgaste físico y emocional de quienes producen la riqueza de un país. En ese sentido, remarcó que el tiempo libre no debe ser considerado un privilegio, sino un derecho fundamental que impacta directamente en la salud, el bienestar y la cohesión familiar.

Las palabras de Lula reavivan el debate regional sobre la reducción de la jornada laboral y la necesidad de avanzar hacia modelos de trabajo más humanos, donde la productividad conviva con el derecho al descanso, la vida familiar y el desarrollo personal.

En un contexto de profundas transformaciones en el mundo del trabajo, el mensaje del presidente brasileño interpela no solo a los gobiernos, sino también a empleadores y a la sociedad en su conjunto, invitando a repensar qué modelo de desarrollo se quiere construir y a quiénes debe beneficiar.