El Gobierno apura la reglamentación de la Ley de Inocencia Fiscal para que en 2026 los argentinos ingresen sus dólares del colchón, ahorrados por fuera del sistema formal.
La idea es que el proyecto que el Senado convirtió en ley el viernes avance rápidamente para favorecer la remonetización de la economía, en el marco de la nueva fase del programa monetario que busca acumular reservas.
De acuerdo a lo que indicaron, la reglamentación estaría a cargo de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) y de la Unidad de Información Financiera (UIF).
De acuerdo a lo que pudo saber TN de acuerdo a fuentes oficiales, hay un interés latente puertas adentro del Gobierno de poner en marcha esta iniciativa por lo que se está “tratando intensamente”. De todas formas, reconocieron que los cambios en la Ley Penal “no son tan sencillos” para implementar.
Además, los bancos esperan los detalles de la reglamentación porque “están bastante confundidos” y le presentaron incluso sus inquietudes al Banco Central.
En ese contexto, el ministro de Economía, Luis Caputo, instó a los bancos a que no pongan obstáculos a quienes busquen formalizar sus divisas.
“Si en sus bancos les piden cosas de más (léase, romper las p…), no pierdan su tiempo. Pueden ir al Banco Nación, donde su presidente dará la instrucción de cumplir estrictamente con la ley, esto es, que la persona solo tenga que mostrar que se ha adherido al régimen de ganancia simplificado”, enfatizó Caputo en su cuenta de de X.
La Ley de Inocencia Fiscal crea el Régimen Simplificado de Ganancias, pensado para quienes tengan ingresos anuales menores a $1000 millones y un patrimonio inferior a $10.000 millones, siempre que no sean grandes contribuyentes.
Con el nuevo esquema, ARCA no controlará los gastos de un contribuyente o los bienes que posee. Solo tendrán en cuenta los ingresos facturados y los gastos deducibles para calcular el Impuesto a las Ganancias. Si el contribuyente paga en término lo que ARCA estipula, queda liberado de cualquier otro reclamo por Ganancias.
Además, quienes adhieran al régimen podrán comprar autos, casas o realizar grandes operaciones sin quedar bajo la lupa de ARCA. Tampoco los bancos, concesionarias, escribanías ni tarjetas de crédito estarán obligados a informar sobre esas transacciones.
Por otra parte, la Ley de Inocencia Fiscal introduce una reforma en el Régimen Penal Tributario. En primer lugar, actualiza los montos que determinan los delitos fiscales.
Por ejemplo, el piso para la evasión simple subirá de $1,5 millones a $100 millones, y para la evasión agravada de $15 millones a $1000 millones.
También se incorpora un mecanismo que permite extinguir la acción penal si el contribuyente cancela la deuda e intereses antes de que se formule la denuncia.
Si el proceso ya se inició, podrá cerrarlo con el pago total más un 50% adicional dentro de los 30 días. Esta posibilidad solo podrá usarse una vez por persona o empresa.
Además, se reducen los plazos que tiene el Estado para revisar y reclamar impuestos. Se propone un esquema de tres, cinco o diez años, según el nivel de cumplimiento del contribuyente.